El Building Information Modeling (BIM), o Modelado de Información de Construcción en español, es mucho más que una herramienta; es una metodología de trabajo colaborativa diseñada para facilitar la creación, procesos y gestión conjunta de proyectos de construcción en el sector. A través de un modelo de información digital centralizado, todos los agentes involucrados en un proyecto pueden participar en la gestión del modelo BIM durante todo su ciclo de vida. Esto permite intercambiar, controlar y rastrear información en tiempo real, reduciendo los tiempos de diseño, gestión y ejecución del proyecto.
BIM en el presente y en el futuro
Durante todas las fases de un proyecto, desde el diseño hasta el final de la vida útil, BIM permite incorporar información de distinta naturaleza. Además de las tres dimensiones del modelado, se integran otros aspectos como la temporalidad (4D), los presupuestos (5D), la dimensión ambiental (6D) o la variante de mantenimiento (7D). La metodología BIM se plantea como una herramienta que integra todas las disciplinas involucradas y a profesionales de distintos ámbitos. De allí que los errores de diseño, la falta de previsión de los trabajos de construcción se puedan prever o identificar rápidamente y gestionar desde un CDE (Common Data Environment) con la información actualizada y disponible para todos los participantes. Por otra parte, la integración de la dimensión ambiental también incide en la mejora de la eficiencia energética y de la sostenibilidad. Desde las primeras etapas del proyecto es posible actualizar de manera precisa y constante los datos. Tanto sobre los espacios como de los sistemas construidos para, ¿por qué no? poder reusar o reciclar los materiales. Así, también es posible controlar de forma digitalizada todo el proyecto y su uso a través de un Digital Twins, aportando resiliencia a todo nuestro entorno construido.
Ventajas
El uso de BIM en el proceso de diseño y construcción tiene varias ventajas, entre ellas:
1. Ahorro de costes y recursos: Con BIM, los profesionales de la construcción pueden estimar los costes relacionados con los materiales, el envío de materiales y la mano de obra. Esto no sólo da a los arquitectos una mejor idea de cuánto costará el proyecto, sino que también les ayuda a descubrir nuevas formas de reducir costes desde el principio. Por ejemplo, pueden elegir materiales más rentables, etc.
2. Ciclo de vida del proyecto más corto: Por lo general, cuanto más rápido se termine la construcción de una estructura, menos dinero se gastará en el proyecto.
3. Mejora de la colaboración y la comunicación: El ecosistema BIM permite a los equipos compartir los modelos del proyecto y coordinar la planificación. Esto garantiza que todas las partes interesadas en el diseño tengan una visión detallada del proyecto.
4. Sostenibilidad: BIM ayuda a reducir los residuos de la construcción y a informar sobre los datos de carbono. Esto contribuye a que los proyectos de edificios e infraestructuras sean más sostenibles.
5. Transparencia: Existe un debate en curso sobre la posibilidad de que BIM sea la mejor forma de luchar contra la corrupción. BIM permite una mayor transparencia durante las fases de desarrollo, reduciendo así eficazmente la probabilidad de que se produzcan errores de diseño intencionados, informes de progreso falsos y manipulaciones en la estimación de los proyectos.